Para la clase de español del martes 19 de enero de 2021

¡Hola "Los Pajarillos"!

En la clase pasada hablamos de la película “Nueve Reinas”, de la historia, del idioma, de lo que comprendimos o no, de lo que nos gustó o no.

La semana que viene seguiremos hablando de esta película: los actores, la música y la canción de Rita Pavone, Buenos Aires, los edificios, etc… Los que fueron a Buenos Aires tienen que elegir una foto característica de la ciudad.

En el siguiente fragmento vemos a los protagonistas después de haber estafado a una viejita:    

Juan: - Me dio cien

Marco: - Divina la vieja.

Juan: - Le mandas saludos a tu mamá.

Marcos: - Mucho lío: tener que ir a Chacarita, saludar a mi viejo que está al lado. Mucho quilombo.

Juan: - Y me dio esto que se lo tenía que devolver.

Marco: - ¿Por qué no te lo quedaste?  
 

Juan: - Porque no soy un chorro.

Marco: - ¿Qué te pasa?

Juan: -Nada

Marco: - ¿Querés el anillo?

Juan: - No, no es eso.                                       

Marco: - ¿Qué es?    

Juan: - La vieja.   

Marco: - A ver si entiendo: A empleadas de estación de servicios, sí, a viejitas confiadas nunca, jamás.

Juan: - No es eso… me dijo que me parecía al nieto.

Chorro: Ladrón      Quilombo: Follón, lío, desorden.

 

El cementerio de la Chacarita  

El nombre del barrio, que da nombre al cementerio, es el diminutivo de Chácara o Chacra, una palabra quechua que significa quinta, granja. En este caso, se trataba de la Chacra del Colegio que la Compañía de Jesús tenía en las afueras de la Ciudad de Buenos Aires hacia mediados del siglo XVIII. Por ello se la conocía como "la chacrita" o la "chacarita de los colegiales".

Inaugurado en 1871 por la municipalidad de Buenos Aires para enfrentar a la epidemia de fiebre, el cementerio de Chacarita cuenta con 95 hectáreas. Desde su creación, la necrópolis se modificó varias veces para mejorar sus condiciones espaciales y fue un lugar de experimentación de la arquitectura funeraria.

Hoy en día, es el más grande de Buenos Aires, de América latina y uno de los más grandes del mundo. Allí, donde descansan algunas figuras argentinas como los tangueros Carlos Gardel, y Osvaldo Pugliese o Aníbal Troilo

Itala Fulvia Villa realiza el Sexto Panteón (también llamado Panteón Subterráneo) en un contexto próspero de post Guerras, donde la población porteña se triplicó entre 1920 y 1960, pasando de un millón a tres millones. Frente a la necesidad urgente de una gestión de los muertos, la arquitecta, en ruptura con las formas del pasado, propone reinventar el cementerio Moderno.

 

 

Hasta el próximo martes a las 5:30  de la tarde por Zoom.

Paquita