miércoles, 4 de junio de 2025

"La mujer con la cabra", obra de Maruja Mallo

A Juanita le gusta este cuadro y aquí está su comentario:

En la producción pictórica de Maruja Mallo se pueden observar diferentes períodos; él que más me gusta es el primero cuando brillan colores vivos.

Así que he buscado cuadros coloridos y he elegido un cuadro que tiene como título «La mujer con la cabra». Es un óleo sobre lienzo, cuadrado de 110X100. Lo pintó en 1927 durante una estancia en Canarias.

La mujer con la cabra. Maruja Mallo. 1927

Se notan tres partes: en el primer plano, una mujer joven que camina decidida, sujetando la correa de una cabra que anda a su lado; en segundo plano, a la izquierda, a su ventana pintada de azul como la parte baja y el lado de su casa, se asoma una mujer; y a la derecha el paisaje que nos indica dónde estamos.

La mujer joven es de tez morena, va descalza, liberada de sus zapatos. Es moderna y dinámica, viste vestidos sueltos de colores vivos, contrastando con su pelo largo, liso y negro.

 Va sola afuera y sabe a dónde va. Se puede decir que representa la mujer «nueva».  Tiene el mismo paso que la cabra a su lado (que se parece más bien a un galgo). Caminan al mismo compás y es interesante observar cómo se sobreponen las piernas de la joven – que se perciben a través de la falda (es muy moderno representarlas) - con las patas de la cabra.  Entendemos que esta cabra con sus cuernos larguísimos simboliza la liberación femenina, la independencia. Por otra parte, conocemos la índole de la cabra: curiosidad, perseverancia, lo que nos da a entender que la liberación femenina se conseguirá poco a poco.

Al lado izquierdo una mujer a la ventana de su casa. De ella, no se percibe mucho: sólo su cara, el cuello, los hombros y el brazo izquierdo que alza. El tamaño reducido de la ventana y el interior negro sugiere su casi encerramiento en un hogar muy tradicional con la cortina bordada y un reloj que marca el tiempo.

Tiene el pelo corto y rizado, la piel blanca (ya que no sale a la calle) y ojos tristes. Va vestida de una blusa roja y alza la mano como un saludo.

No creo que las dos mujeres comparten algo, a lo mejor no se ven. No viven la misma vida: una sale la calle, liberada, decidida (podemos imaginarla fuerte y trabajadora), la otra dentro de su casa viviendo como su madre. A su ventana un lirio, símbolo de pureza y de fidelidad.

El paisaje parece desértico con un áloe azul-verde bastante grande, plantado en rocas rojizas al lado de unas hierbas quemadas por el sol. El áloe representa la vitalidad, la inmortalidad y la felicidad; dicen que atrae energías positivas.

Vemos otros lirios más en acantilados, murallas y torres y divisamos el mar azul muy claro. En el fondo, por la otra orilla del mar se notan otras murallas, torres y castillos rojos y amarillos, también unos palmitos.

Al borde del mar se puede observar también una canoa lista para salir, ¿hasta la libertad?

Encima del mar vuela un ave blanca, un palomo con las alas bien abiertas y la cola extendida.  Vuela en total libertad, en paz.

Este cuadro parece ser un resumen visual de la gran lucha de Maruja Mallo por la emancipación de las mujeres.

Juanita

No hay comentarios:

Publicar un comentario