Kamchatka
Es
la historia de una familia después del golpe de estado en Argentina, en 1976.
Hay cuatro personajes: los padres, que tienen cerca de 35 años y sus dos hijos
que tienen entre 5 y 10 años.
Todos
se quieren mucho.
Por
causa de la dictadura y de las opciones políticas de los padres, la situación
de esta familia se hace siempre cada vez más difícil. Tienen que cambiar su
apellido y sus nombres y dejar su casa por una que les presta alguien. Los niños
tienen que dejar su escuela y sus
amigos; luego van a una
escuela católica que no le gusta al chico
mayor. Los padres no pueden seguir ejerciendo sus profesiones y al final,
deciden separarse de sus niños, dejándolos con sus abuelos para protegerlos.
Hay
un ambiente de peligro y de misterio porque los adultos nunca explican a los
pequeños lo que pasa, por qué están en
la nueva casa, ni por qué Lucas, un joven, viene a vivir algunos días con la
familia y después se va.
Durante
toda la película, nos preguntamos qué drama va a ocurrir. Dentro del núcleo familiar es dada tanta
importancia al amor que
sentimos que luego estarán
separados. Y el final, cuando esto sucede es muy conmovedor.
Pero el ambiente de la película no es
demasiado oscuro porque los padres hacen
todo lo que pueden para
mantener una vida normal en la
familia. Juegan, bailan, ríen con los chicos. Daniel (el padre) y Harry suelen
jugar a Kamchatka y este juego se hace el
símbolo de la
resistencia.
A
mi me
gustó mucho porque no hay escenas de
violencia. Todo
es
sugerido. Los
padres son maravillosos porque tratan de evitar
el miedo
y los
sufrimientos a los familiares. Y el espectador también está
preservado, aunque llore al final!Annie
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